Algo que llama la atención es esa conexión que se crea entre los campers una vez que han pasado unos días. Como hemos comentado otras veces, es increíble ver cómo algunos parece que se conocen de toda la vida una vez que se les ha adjudicado alojamiento. Ese vínculo de amistad perdura en el tiempo y ahora, con las nuevas tecnologías, pueden seguir en comunicación y se llaman, y se escriben códigos que sólo ellos entienden. Lo que pasa en el campamento se queda en el campamento y resulta difícil, al volver a casa, que los demás tengan una idea clara de las impresiones y vivencias que tiene el camper, la experiencia vivida.
Al comienzo del campamento los niños se presentan tal cual son, sin perjuicios, sin el peso del cómo son en casa, en el cole, en el barrio... se muestran tal cual, salvo los que en un principio son reservados pero que con el tiempo se abren y se muestran sociables o en sintonía con algún compañero.
Nos alegra ver también ver cómo a veces en esas pandillas tienen cabida mayores y pequeños. Las hay también formada todo de chicas o todo de chicos pero eso da lo mismo, lo importante es la creación de ese nexo, ese lazo de amistad que con sus concordias y desencuentros les ayudará a formarse como personas.
Si tú también quieres participar en un campamento de verano en inglés o quieres venir a vivir una experiencia con tu colegio, escríbenos a camps@mundoenred.com o llama al 915489192