Las actividades al aire libre siempre resultan beneficiosas para nuestra salud física y mental.

Caminar por campo o la montaña, respirar aire puro y disfrutar del silencio armonioso de la naturaleza nos conecta y nos limpia de alguna manera, por dentro. Para los adultos supone una forma excelente de alejarse del trabajo o la rutina y relajarse. Para los niños supone un acercamiento al ser de la vida, a las primeras formas, al estudio de nuestro entorno más vital que nos proporciona lo esencial.

Ahora más que nunca, buscamos esa puerta que nos conduzca al espacio que nos proporcione calma y que nos ayude a centrarnos, ya sea dentro de España o fuera.

De cualquier forma, actividades realizadas tanto en grupo, en familia, o individuales son enriquecedoras y esperamos que, siendo todos respetuosos, pronto podamos volver a realizarlas.

El ambiente en las ciudades ha cambiado y la concepción que tenemos de "aire libre" también. Ya no sólo nos imaginamos un paisaje entre montañas o en medio de un prado, sino simplemente, una zona verde que nos proporcione esa calma aunque estemos en una población. Difícil será la vuelta a la normalidad no sólo a nivel sanitario sino también económico. Entre todos tendremos que darle una vuelta, permanecer unidos y ayudar en lo que podamos al prójimo el cual, por sus circurstancias, tiene dificultad de salir de esta.

Hasta entonces, tenemos la esperanza que siempre esa puerta al airelibre "outdoor", permanezca entreabierta, porque significará que hay un después a todo esta vorágine y podremos volver a disfrutar de otros lugares en España o en otros países donde seguir aprendiendo.


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