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ENE
2016
Un tema importante y en el que tenemos el mayor de los cuidados es con las alergias e intolerancias con las que muchos niños vienen al campamento. Después de realizar la inscripción del nuevo camper y estudiar su historial, nos ponemos en contacto con los padres o tutores para matizar la atención que requiere. Nuestro personal está preparado para atender a las necesidades del niño, pero una información adicional nos puede ayudar en el trato con el menor. Por ejemplo, son muchos los padres que nos facilitan un menú, marcas de productos determinados, alimentos que no deben consumir...
Las alergias e intolerancias alimentarias con las que hemos tratado han sido muy diversas, desde leche de vaca, la soja, las legumbres, huevos, cereales, frutas, pescados, marisco y frutos secos.
Cada vez son más las personas que las padecen y hemos tenido varios casos en la que esta era severa. Para tener mejor controlado este servicio, delegamos en dos monitores instruidos que son los que se encargar exclusivamente de ellos. Al igual que en los colegios, los campers que necesiten una dieta personalizada y estricta, comerán en una mesa conjunta. En el caso de que la alergia alimentaria sea rigurosa, el camper comerá junto a un monitor que lo controle y vigile. En otros casos los padres y tutores confían en la responsabilidad del niño/a por ser más mayor o por ser más maduro y únicamente los monitores se limitan a servir su menú.
Está claro que son los padres o tutores quienes tienen que confiar en la atención que se le de al menor y son también conscientes de que el peligro existe en cualquier lugar, ya sea en el colegio, en el campamento, en casa de un amigo, en el parque o incluso en el hogar. Con educación y paciencia, irán creando hábitos que el niño irá asumiendo de forma natural sabiendo rechazar hasta el más tentador de los pasteles.
En el caso de otro tipo de alergias como las respiratorias, a medicamentos, dermatitis, a insectos o ambientales, procedemos con el mismo cuidado. Cada camper tiene una ficha en la que se especifica el protocolo a seguir en lo que se refiere al suministro de aerosoles, medicamentos o sustituir alguna actividad por no ser adecuada. De la misma manera, serán dos monitores coordinados los que controlen a estos niños.
Todo el equipo del campamento tiene un listado de los niños que tienen algún tipo de hipersensibilidad y nuestro mayor interés es velar por su bienestar y porque su estancia sea agradable.
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