Uno de los asuntos que más preocupan a los padres a la hora de buscar un campamento de verano para sus hijos es la capacidad de reacción y medios de que disponen los organizadores del campamento en caso de emergencia. No sólo es importante disponer de los medios adecuados en las instalaciones, también es imprescindible que el personal esté preparado para ello, tener un botiquín equipado, y vehículos de apoyo siempre disponibles.

Para trabajar en un campamento de verano en la comunidad de Castilla y León como monitor, hay que disponer de un título oficial que acredite la preparación para trabajar con niños, como es el título de monitor de ocio y tiempo libre. Todos los monitores reciben formación básica en primeros auxilios. Nuestro coordinador de tiempo libre tiene una preparación en este aspecto ligeramente superior, y es la persona que cumple el rol de organizador de todo el equipo de monitores y profesores. 

En los últimos años hemos aprovechado para incorporar entre los monitores de tiempo libre a alguna chica con titulación de enfermera, para ayudarnos en las atenciones básicas, lo que nos ha facilitado realizar pequeñas curas por las típicas heridas en juegos (raspones, pequeñas heridas) de forma más eficiente. Tener piscina propia en nuestras instalaciones además nos obliga a disponer de un socorrista titulado, que también suele ser parte del equipo de monitores de ocio y tiempo libre, por lo que está con nosotros todo el campamento.

¿Son necesarios tantos vehículos?

Desde que comenzamos a realizar campamentos con instalaciones propias hace nueve años, una cosa nos ha obsesionado: tener siempre vehículos disponibles para atender posibles emergencias. A pesar de que nunca hemos tenido accidentes graves en ninguna de las quincenas de campamento que hemos realizado, ni en las actividades con colegios fuera del verano, el disponer de tantos vehículos nos ha facilitado poder dar soporte en varios campamentos a la vez en España, o llevar en pocos minutos a niños con reacciones alérgicas o similares. 

Pongamos un ejemplo. En el año 2011 un grupo de un colegio que vino a realizar una actividad con nativos en primavera, subió hasta el refugio en una actividad de "nature walk", donde recogemos hojas, flores, etc, para trabajar el vocabulario en inglés sobre unas cartulinas cuando bajamos. En la explanada del refugio además al llegar solemos realizar juegos típicos de campamento. En esta ocasión nos llamaron al campamento desde el refugio, para decirnos que había seis niños con una reacción alérgica. Inmediatamente subimos con nuestro Nissan Navarra 4x4 montaña arriba, y los bajamos a los seis. Uno de ellos tenía una hinchazón de ojos importante, y les trasladamos al centro de salud para adminstrar los antialérgicos corresponedientes en cuestión de minutos. Si la urgencia hubiese aún mayor (normalmente los padres nos lo advierten en sus fichas médicas), hubiésemos subido con la moto de campo que tenemos disponible para acercarnos donde haga falta con rapidez.

Este tipo de cosas podemos hacerlas con eficiencia gracias a los vehículos disponibles en el campamento.


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